La Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA) dejará sin efecto el sistema de pago simplificado del Impuesto sobre los Ingresos Brutos para pequeños contribuyentes denominado Arbanet, que había recibido críticas y fallos judiciales adversos, y lo reemplazará por el actual régimen general de declaración jurada online.
Sólo hace una semana que asumió el nuevo director de ARBA, Gastón Fossati, con amplia experiencia en el sector privado, y las controversias explican que sea la primera medida que toma. Hay 500.000 contribuyentes en Arbanet, incluyendo a personas físicas que facturan menos de $ 300.000 por año.
La recaudación de Ingresos Brutos con este mecanismo fue en 2015 de un promedio mensual de $ 35,5 millones. Esto representó menos del 0,5% del total recaudado por este impuesto en el período. Arbanet es un sistema de pago simplificado con el que la administración pretendía asegurarse un ingreso mínimo, ya que mediante el mismo determina y exige, basándose en presunciones, un monto mensual como pago a cuenta de la determinación anual. El método sufrió múltiples modificaciones en función de reclamos judiciales y necesidades de la propia ARBA. Y ahora será derogado.
Fossati informó a El Cronista que una vez que el cambio esté formalmente implementado, los usuarios de Arbanet «comenzarán a utilizar la modalidad de declaraciones juradas vía web, como lo hace el resto de los contribuyentes», y afirmó que «este sistema constituye una opción más transparente, simple, moderna y eficaz».
«El funcionamiento de Arbanet dejó de ser eficiente, tanto para el Fisco como para los contribuyentes, así que lo eliminamos», enfatizó Fossati.
¿Cuáles fueron las razones para la eliminación de Arbanet?
Se tuvo en cuenta que una de las principales críticas que se hicieron al sistema es que la determinación del monto a pagar se establecía en forma presunta, vulnerando lo dispuesto en la Ley de Coparticipación respecto de los anticipos del Impuesto sobre los Ingresos Brutos.
El monto a pagar del anticipo se determinaba a partir de las múltiples informaciones que posee ARBA, tales como movimientos bancarios, retenciones y percepciones, ingresos informados a otras administraciones o la categoría en el Monotributo, y esta metodología no era clara para los contribuyentes.
El equipo que conduce Fossati concluyó las siguientes debilidades de Arbanet:
– Falta de transparencia en la determinación de anticipos preliquidados: el contribuyente desconoce el método que utiliza ARBA para calcular el monto a pagar.
– Los contribuyentes no pueden interponer ningún reclamo para reducir alícuotas de los regímenes de recaudación, ya que el sistema lo impide automáticamente.
– Carece de efectos sancionatorios.
Al pasar a tributar con el nuevo aplicativo general por Internet, una de las ventajas es que éste integra la información autodeclarada por el contribuyente con las retenciones y percepciones que se le practican, aportándole integridad, simplicidad y veracidad a esos datos, afirmaron en ARBA.
¿Cómo se fiscalizará a los pequeños contribuyentes?
Las características de los pequeños contribuyentes dificultaban su fiscalización por los métodos tradicionales, pero la implementación meses atrás del nuevo sistema electrónico de Fiscalización Remota (FIRE), permite abarcar a 100% de quienes exhiben inconsistencias en Ingresos Brutos, indicaron en la Agencia.
Fuente: www.cronista.com